lunes, 9 de octubre de 2017

arquitectura efímera


Escribo un verso
y espero impaciente
a que se derrame el poema:
que encuentre estructuras latentes,
un puente colgante de ingenio,
que una penínsulas de palabras
construyendo una isla para vivir un rato.

Escribo un verso:
el sol quemaba la hora punta de tus miedos,
y se apresuran otros verbos a desdecir el mediodía.
Hay una llave a punto de abrir una habitación mal ventilada:
bombea un desencuentro debajo del colchón,
como un felino espera a su presa,
en la sombra, afilando las uñas.
En la trastienda se han dispuesto los paisajes de la nostalgia:
una esfera amarilla, con urgencia por esparcir consonantes,
aglutina arritmias de nombres propios,
ciudades costeras y mares de vocales.
A veces tarareo una coma
o dejo en cursiva algún silencio.
Pero yo, que sólo puedo ser espectadora,
me ciño a los acentos y a la geometría del papel. 










1 comentario:

A-KanΦ dijo...

"Escribo un verso y espero impaciente a que se derrame el poema: que encuentre estructuras latentes, un puente colgante de ingenio, que una penínsulas de palabras construyendo una isla para vivir un rato."

Se me ha clavado como hacen los buenos versos, directo. Será porque llevo tiempo queriendo escribir y que las palabras aparezcan, el verso se convierta en prosa, y el todo sea poesía.

Una pena que hayamos perdido la costumbre de acudir a este medio para convertirnos en "arquitectas efímeras". De todos los blogs que sigo y seguía, eres la que más recientemente ha publicado, 2017. Supongo que todos seguimos, como seguían nuestras vidas.

Un placer volverte a leer. Espero que hayan ido bien estos 3 años.