miércoles, 22 de diciembre de 2010
domingo, 19 de diciembre de 2010
Podemos prometer la eternidad en un instante,
regalar el abismo.
Podemos regarnos las plantas de los pies,
intentar echar raices.
Podemos construir castillos en el aire
creyendonos libres de inocencias.
Todo puede ser tan cierto como sangre que dejes
en la comisura de unos labios al besarlos.
Podemos llevar tormentas en los ojos,
dolernos por capricho.
Porque los dolores siempre están en potencia.
Porque el cielo y el infierno a veces se presentan
equidistantes de la boca del placer.
Se consumen las luces amarillas, alumbrará el recuerdo.
regalar el abismo.
Podemos regarnos las plantas de los pies,
intentar echar raices.
Podemos construir castillos en el aire
creyendonos libres de inocencias.
Todo puede ser tan cierto como sangre que dejes
en la comisura de unos labios al besarlos.
Podemos llevar tormentas en los ojos,
dolernos por capricho.
Porque los dolores siempre están en potencia.
Porque el cielo y el infierno a veces se presentan
equidistantes de la boca del placer.
Se consumen las luces amarillas, alumbrará el recuerdo.
Etiquetas:
historias para no dormir,
latidos
martes, 14 de diciembre de 2010
domingo, 5 de diciembre de 2010
sábado, 4 de diciembre de 2010
Amar la trama y el desenlace de cada respiración, mientras los cristales del coche se empañan y dibujamos calendarios donde los sábados tienen veintiseis horas. Tres de ellas siempre para olvidar la distancia de entresemana.
Las manos limpias, el pecho altivo, por querernos a cada rato mejor.
Anatomía cóncava y convexa es la desproporción en los árboles del bulevard, tan huérfanos, tan flacos.
Dejamos tres calles más atrás el primer noviembre de la década.
Las manos limpias, el pecho altivo, por querernos a cada rato mejor.
Anatomía cóncava y convexa es la desproporción en los árboles del bulevard, tan huérfanos, tan flacos.
Dejamos tres calles más atrás el primer noviembre de la década.
jueves, 2 de diciembre de 2010
El alpinista de los sueños
Tiempo después del fallecimiento de Antonio Vega varios artistas se juntan para darle un nuevo giro a las letras de su vida. Uno de los mejores resultados, no podía ser de otra manera, es Desordenada habitación interpretada por el ex-pirata Iván Ferreiro.
Despierta ya, mira que luz
Nada envidia el norte al sur
Recuérdame que lo de ayer, no se olvida sin querer
Eramos uno y uno y luego dos,
Mas cerca cada vez de un sueño sin adiós
Desordenada habitación
Son tu calor, hacerte el amor
Mis miedos y pasión
Tanto soñar, con esa flor mezcla de sol y temporal
El doble filo de un amor real, actores sin guión
Un mundo teatral, función sin hora de empezar
Deja el frío y entra en calor, y lo oscuro deje paso al color
No me canso nunca de hablar, porque vivo en el silencio mas total
Diez años antes era igual
Eramos uno y uno y luego dos,
Mas cerca cada vez de un sueño sin adiós
Desordenada habitación,
Hay algo mas, recuérdame que hay que ordenar la habitación.
http://www.youtube.com/watch?v=cS6KIn0gq24
Suscribirse a:
Entradas (Atom)